Soñando Eilat, la perla de Israel

Eilat no tiene el mismo atractivo magnético que Jerusalén o el desierto de Negev.

Ubicada en el extremo sur de Israel, esta tranquila ciudad costera en el Mar Rojo claramente lleva las marcas del puesto fronterizo.

A pocos kilómetros de la Aqaba medieval en Jordania, rodeada por el desierto y los numerosos contenedores a lo largo de la costa, Eilat se ha desarrollado mucho en la última década.

Viniendo del hebreo Elah (pistacho), me fascina la hermosa playa de Eilat Marina, con un mar de encanto tropical y el arrecife de coral.


Cerca de la Reserva Barrera también hay un tramo de mar donde es posible conocer a los delfines.

Como buen amante de los animales fue emocionante jugar con ellos; yo también quería bucear pero el costo era prohibitivo (80 dólares).

Por otro lado, estan muchas especies marinas, en particular peces de colores brillantes como las anémonas y una forma rara de anguila que se camufla entre las rocas.

La excelente ubicación de la ciudad, el agua de color índigo y la moderna pasarela aseguran que caminar y relajarse hagan que la experiencia sea placentera.

Además, puedes practicar muchas actividades (snorkel, vela …) y frente a ti está el espectáculo de las montañas jordanas y el misterio del desierto.

 

 

 

 

 

 

Eden Garden es un lugar fabuloso y un gato astuto deambula entre las mesas … ¡ten cuidado si no terminas como mi sándwich devorado por el felino!

La Barrera de Coral es también una gran reserva natural; extendido por 1,2 km, es la barrera más septentrional del mundo.

En condiciones de excelente visibilidad también se pueden ver los picos del monte Sinaí en Egipto.

Durante la noche Eilat muestra su lado más encantador: elegantes salones en la playa, bulevares rodeados de palmeras y luces y una animada vida nocturna.

Presta atención: una pinta de cerveza cuesta 8 euros de media!

La cocina israelí se acerca bastante a la mediterránea: pescado, aceitunas, ensaladas y drous, o hummus (una mezcla de legumbres y lentejas) así como platos más populares como bulgu y pita.

El último día optamos por una fabulosa mezcla de diferentes pescados: salmonete, salmón y Zeus Faber (pez de San Pedro).


Una comida digna para terminar felizmente nuestros viaje!